jueves, 21 de julio de 2011

Instrumento Prehispánico de construcción Arquitectónica increíble



Chavín (1000 a.C.) alcanzó un alto grado de desarrollo técnico. Sólo hay que observar la ubicación del Templo de Chavín de Huantar, recorrer sus intrincadas galerías subterráneas y el sistema sonoro hidráulico para convencerse de que los conocimientos de los chavinenses eran notables. Este sistema que estudió Luis G. Lumbreras (1976), fue construido para ambientar con sonido el «Lanzón» ubicado en una galería subterránea del Templo. Para conseguir este efecto sonoro, se aprovecharon los desniveles del curso de los ríos Mosna y Wacheqsa entre los que se encuentra el Templo, conectando los dos ríos a través de un canal por el que se desliza el agua del río que está en el curso de nivel más alto hacia el del que lo tiene más bajo.
El canal está diseñado para generar turbulencia artificial del agua circulante. El sonido que produce este artificio era conducido por otros canales, que estaban conectados a unas cámaras en que se le reservaba y enviaba en la misma forma para que terminase en unas bocas o ventanas ubicadas en las paredes del recinto subterráneo, donde está ubicado el Lanzón. Esto hace suponer que el sistema ambientaba al Lanzón de tal manera que «rugiera» como una horda de pumas, mientras el sacerdote oficiaba alguna ceremonia.

0 comentarios:

Publicar un comentario